ÁRBOL SECO
Soy un árbol seco: la savia se consumió en mí. No siento siquiera al viento, las
aguas son historias no contadas. Caída estoy antes que mis hojas, santuario de un cuerpo flagelado. Absorta en el
dolor vegetal: ¿por qué me has abandonado?
ENTRE LA NADA Y LA NADA
Esta inusitada hora en la que
el silencio se apodera de mis ojos, hora en la que no logro secuestrar en el tiempo las palabras, llueve en mí
la Nada. Broto con deseos de desaparecer, de acabar con todo y acabarme en el argumento superficial de los filósofos.
EL
RETORNO DE LA MUSA
No soy más, la desconocida que nunca esperaste, aquélla con manos de sal y ojos de barro. Ésa
que burló a los dioses danzó con los que suben las pirámides acostados en sarcófagos. Ésa que vino a subyugar soles, a
degollar la lluvia en las casas de los que esperan sin tiempo el retorno del silencio.
EL RITO
Mi
amado con sus ojos labra la ternura. Su melancolía desprendida lo hace invencible ante la supervivencia de las olas. Su
locura lo hace más bello ante el mito de Adonis. Desde que ha bebido mi savia celebramos un rito desconocido.
ANGUSTIA
EN MI SANGRE
La noche entró en el alma, la luna permanece afuera.
No es invierno y la nieve cubre mis entrañas. La
calma tiene por nombres: angustia en mi sangre, nido de fantasmas, canales abismales, irreales existencias.
Resido
donde nombrarte sigue siendo ese delirio que no respondes.
ANSIEDAD
Lágrimas amontonadas debajo
de una nube, su risa candorosa evoca hastío, vacuidad.
A oscuras se pliega la pupila, la vida se vierte en
voces ahogadas.
Soy la que se busca en sitios no geográficos, ésa que ansía perderse.
ABANDONO
Abandonaré
un dulce dolor; traspasaré los ojos fríos del buitre; me aliaré al milagro inexistente. Escarbaré edades que no tengo; cerraré
la vida con espejos rotos, por sueños holográficos: Girasoles circundarán épocas repetidas en el intrínseco acto
del misterio.
ALUSIÓN
Nací en el tiempo de las valquirias en la estación de los corazones abstractos. Te
presentí un momento antes de la llegada de los unicornios, justo cuando los hermafroditas extirparon de sus pieles la
sonrisa azul y helada de los corsarios.
TRISTEZA
Te he esperado con mis labios rotos para que me descubras
llena de agujeros. Tiemblan mis tobillos con tristeza adepta al decapitado aliento de los cerezos.
FETICHISMO
No
me importa envejecer amando el olor del pantalón que dejaste en el armario o amando tu retrato en la mesita de
aquellas noches donde cortejamos la vida más allá de la oscuridad.
HOGUERA
La tarde se parte en dos
como una vieja tijera. Un faro en el Mar Muerto desentraña el grito ¡La eutanasia a una tribu de piedras! En el
sueño de las mujeres hay una hoguera que espera el sacrificio de aquellos que no supieron amarlas.
HOLOCAUSTO
INTERIOR
Se me revientan los ojos de la ira mientras la tierra menstrúa incertidumbre: nado hacia una fosa
común en el corazón del mundo. En la víspera de las amapolas, los hijos del terror se disfrazan de huesos porque
no tienen piel para lograr ver lo invisible.
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