Juan Antonio Rodríguez, hijo Licey, Santiago 20 de septiembre, 1946Educación: B.A., M.A., Ph.D. Profesión: Profesor universitario,
inglés y español (Actualmente: Chaffey College (1976-presente); Rancho Cucamonga, California, USA; previamente: Universidad
Católica Madre Maestra (1973-74); Texas Tech University (1972-73; 1974-1976). Publicaciones: seis libros sobre la enseñanza
del inglés; artículos académicos sobre educación; poesía en revistas, periódicos, antologías, net
TE AMO
Te amo como a la rosa recordada y ausente en mi espacio,
pero cuya rojura arde en mi cual el fuego;
te amo como a la estrella más brillante de una noche oscura,
y aunque sea secretamente, te llevo en mi alma.
Te amo como a una planta que acaba de nacer y todavía no florece,
pero reconozco que un día abundará en bellas flores;
te amo como al olor y al color de tu cuerpo
cuya aroma tiene mi memoria cual un secreto.
Te amo totalmente ignorante del motivo de mi amor,
pero secretamente sin humildad ni orgullo,
porque de ninguna otra manera he aprendido a amar.
Te amo tal y como siempre tú eres,
y te llevo en el corazón como la sangre mía,
y sin cerrar mis ojos te amo al soñar contigo.
NO ES MI CULPA QUERERTE
Aquí en mi soledad me encuentro yo sin dueño
con íntimos deseos y sin lograr ningún sueño.
Hoy busco tus caricias con amor y cercanía
sin importar que sea la culpa tuya o mía.
Mi pasión humana concretizaría mi amor;
el sentir tus labios me quitaría a mí el dolor.
La íntima cercanía entre yo y tú, mujer,
le quitaría a ambos toda esa sed del querer.
Aprecio los dones que Dios te puso al hacerte bella
y tú en mí reina como la única estrella.
Ando en mi soledad con esta alma tan vacía
y quiero llenarla al hacerte a ti para siempre mía.
Hoy no importa lo que la pasada realidad fuera
porque en ti veo el renacimiento de otra primavera.
Tú eres para mí cual aquella nueva mañana
que vi llover en tiempo de sequía por mi ventana.
He intentado olvidarte tan inútilmente
porque mi razón no puede controlar lo que mi alma siente.
Trate de convencerme de que no te merecía
pero aun en el sueño, tú no eres de nadie más que mía.
En la vida no todo tiene dueño
y hay cosas que nos llegan como aparece un sueño.
Tú me ofreces tu amor como preciosa cosa
y lo recibo en mis manos igual que a una hermosa rosa.
Cuando estoy contigo, pienso tenerlo todo
y sin saber por qué reconozco que te adoro.
Ese mismo Dios que hizo a cada nocturna estrella
me ha hecho enamorar de ti al hacerte tan bella.
A veces me siento cual un río corriendo hacia la mar
al irme donde ti sin la lógica que me hace pensar.
Dios te hizo para mí tan bella, suave y clara
y sería tontería si a ti yo no te amara.
Dios nos hizo la noche y cada brillante estrella
Pero fue sólo para mí que te hizo a ti tan bella.
El no poderte querer sería un dolor sin nombre
porque Dios te hizo mujer para que sea tu hombre.
LA VEJEZ CON LA MUJER IDEAL
Yo podré envejecer junto a la que me tome de mano
Al mirarme con una sonrisa que quite mi tristeza;
Ella reconocerá mi íntima amargura con certeza
Y por mis palabras valorará a mi espíritu humano.
Andaremos los dos con pasadas e íntimas historias;
ella sabrá del tiempo que al vivir le va cerrando cada ventana,
Y ella se sonreirá conmigo al iniciar el día cada mañana
Y como rosas ya vividas serán nuestras íntimas memorias.
Ella será todos los recuerdos que me quedarán un día,
Y al pensar en mí se notará en sus mejillas y su frente
Cuando ya yo sea su anciano y ella la anciana mía.
Me encontrará la vejez tranquilo y arrugado
Cual un libro gastado de contenido excelente
Y dejaré yo escrito lo que otros han callado.
MI JUVENTUD NO FUE UN DIVINO TESORO
Si la juventud verdaderamente fuera un tesoro
No me hubiera hecho tan fatalmente perder;
La juventud ha sido la causa de mi amargo lloro
Porque la tenía cuando no sabía lo que era querer.
En mi ciega juventud nunca encontré a la mujer pura
Porque no sabía cómo evaluar a ninguna por su pudor;
Solía elegir una egoísta y permanecía mi vida obscura
Y es ahora en mi otoño que reconozco a mi triste error.
De joven quise tiernamente con esa inocencia de un niño
Quien creció en hogar siempre abundante en amor y cariño
Y quien habitualmente veía una vida de la eterna primavera.
En vano pensé que ya había encontrado mi verdadera princesa
Y casado supe que la juventud toma el camino que luego pesa,
Y que el otoño le quita al hombre lo que de joven era ceguera.
El TOQUE DE TUS MANOS
Tú te sembraste dentro de mí
con unos toques de tus manos
que llegaron como profundos besos
a este corazón que de ti ya estaba enamorado.
Esos toques me abrieron caminos de ilusiones
donde bellos pájaros volando me cantaban de ti
y de la felicidad que tendrían tus abrazos para mí.
Esos toques hablaron de una dulce esperanza
donde no hay oscuridad, pero sí clara luz
acompañada de un nuevo destino si lo quisieras tú.
Esos toques me dijeron el secreto del silencio
que no se atrevía a articular yo ni tampoco tú
porque me controla el mismo amor que vas sintiendo tú.
Esos toques te han hecho reina de mis versos
al llevarse el corazón y el alma que ya no están en mí,
y creo besarte mucho y locamente al escribirte a ti.
LA MUJER ABRAZADA Y BESADA POR EL POETA
El mundo físico únicamente conoce de abrazos y besos
dados de manera temporal y limitada,
pero la mujer que verdaderamente conoce las obras de un poeta
ha encontrado otra manera para saber ser amada.
Hay mujeres que de cantantes y actores están locamente enamoradas
y hacen clubes, mandan regalos, y hasta escriban cartas que jamás son contestadas.
y por mucho que ellas quieran, los actores y los cantantes no les dan ni una mirada.
Pero hay otras que son sabias y también tan delicadas
porque es en el mundo del poeta donde ellas son besadas y abrazadas.
Ellas entran a la vida del poeta que ha sido íntimamente transfigurada
y ellas lloran de las penas y dolores que el poeta ya vivió
y también ellas bailan en las fiestas de la alegría que él sintió
y disfrutan de los abrazos y los besos que su poesía íntimamente les brindó.
El poeta en sus obras da abrazos y besos traídos de ese mundo
donde reina el alma junta con el corazón
porque él sabe que sus poemas de palabras e impresiones
no son derivados de la lógica aunque haga uno que otro cambio su razón.
Los besos y los abrazos de cada poeta siempre vienen de un galán
quien por escrito se presenta sin escándalo ni afán.
Pero es cierto que solo reciben sus besos y sus abrazos las más sabias y delicadas
que conocen de otros mundos donde ni un beso ni abrazo es temporal.
LA CARICIA DE UNA MUJER
Como si fuera en primavera cuando el sol calurosamente brilla,
Sus manos sobre mí despertaron sentimientos de años muy pasados.
Como si en esa dulce caricia, su corazón le hablara al mío,
Y me dejó deseando que estuviéramos juntos por fin y para siempre.
Yo pensé en pájaros cuyos nidos están hechos
Sobre árboles repletos de verdes y tiernas hojas,
Pero ya era un día de otoño de una mañana dominada por el frío,
Y así fue la manera en que su caricia a mi alma había afectado.
Sin embargo, la realidad sabe que mi frente lleva las líneas del tiempo pasajero
Que físicamente marca la verdad de mis años vividos.
El arador del tiempo trata a la vieja edad como si fuera un crimen
Al dejarle saber a todo el mundo sobre la partida de mi juventud.
Ya no me acompaña esa gracia tan abundante en todo joven,
Ni podría honestamente esperar de una radiante mujer una promesa.
Hoy sentado al escribir y con el descontento cubriéndome la cara,
Solamente me queda el deseo que fuera a mí quien ella amara.
Muy cierto es que el llorar para mí sería en inútiles lágrimas
Porque mi primavera y mi verano vividos me han traído aquí a un avanzado otoño.
El ser un rey con una reina no se ha hecho posible a pesar de tantos años vividos.
Todos tenemos que existir con las barajas que nos haya impartido el destino,
Ya sea la vida fácil o esa de la frente que suele estar cubierta con sudor.
Debemos encontrar fuerza en el amor aunque nos llegue tarde,
Y también debemos analizar nuestros caminos como finalmente estoy haciendo hoy.
CON AMOR VERDADERO
Tu amor trae reflexión de vida donde no existe muerte;
tu calor cambia el frío del invierno a la bella primavera;
por tu amor verdadero ya sé que nada me desespera
y el tiempo hace al amor más bello y a la vez más fuerte.
Mi vida del amor es con ojos cerrados tenerte
y saber que al mirarte mi cariño tú sientes
y nuestras palabras son cual el agua de dos fuentes
y te toco con ternura para realmente quererte.
Mi vida con tu amor está en olvidar ya lo sufrido
al ser tu cercanía un tesoro para siempre obtenido
y donde una sonrisa amorosa es solución de todo.
Para mí, tú eres esa mujer que yo siempre esperaba
y unido a ti, realizo la pasión que tanto yo deseaba
y para poder amarte no tengo que cambiar mi modo.
ESTOY ENAMORADO
Ya no soy el hombre de la pasión helada;
ahora yo soy ése que sabe lo que siente;
ya le doy valor sólo a cada día presente
y a mi alma que está de ella enamorada.
En versos de ella queda todo mi amor grabado;
ya no soy cobarde, pero un hombre valiente;
me domina la soledad si ella no está presente
y mi único deseo es ser por ella siempre amado.
Enamorado se siente mi alma en ella dulcemente encarcelada
como si fuera una enfermedad que jamás deseo sea curada.
La quiero a ella solamente para mí con todo deseo y egoísmo.
Enamorado sé que mi vida sin ella sería sólo un abismo;
sin ella aun con muchas riquezas no tendría yo nada
ni podría jamás sentirme en el mañana como el mismo.
FUERON TIRADOS MIS POEMAS
Ella tiró los poemas que mi corazón unido a mi alma le había creado,
y para mí fue la verdadera muerte de algo que de mí había nacido;
los poemas eran cual hijos que mi alma, cual madre, y mi corazón, cual padre, habían tenido.
Ella quiere que todo siga igual ahora que ha dejado mi alma y mi corazón destruidos.
Mi mundo de poeta no aspira crear hijos para que por indeferencia vayan a ser destruidos.
El poeta a veces hace una reina de cualquier mujer que jamás haya conocido
y aunque ella nunca lo sepa, por su inspiración se unen su alma y su corazón,
y el poeta se convierte en creador y de él salen otros hijos que jamás había tenido,
y cual hizo Dante, él se los presenta al mundo aunque a Beatriz jamás haya conocido.
El mundo del poeta no es ese temporal al que todos hemos físicamente nacido.
El poeta suele dejar la vida cotidiana y sus tormentos para no ser destruido.
En su mundo, el poeta es un rey y escoge a cualquier mujer para que sea su reina.
El poeta puede ser el marido más fiel que este mundo temporal haya conocido,
pero en la soledad, lo puede inspirar cualquier mujer quien de él jamás haya sido.
Pero sea su novia o sea su mujer, el poeta pierde la inspiración ante cualquier mujer
que haya tirado cual basura lo que de él y dentro él haya poéticamente nacido.